martes, 18 de junio de 2013

José Vasconcelos (1882-1959): impulsor de la revolución en los andamios “El muralismo mexicano”. III

 

En 1929 José Vasconcelos decidió postularse como candidato para la presidencia de la república, lo que lo llevó a enfrentarse con el candidato de Plutarco Elías Calles, Pascual Ortiz Rubio (1877-1963) que trajo como consecuencia una inequitativa campaña, pues toda la maquinaria política del estado fue orquestada a favor de Ortiz Rubio.

Vasconcelos contó con el apoyo de celebres personajes como: Antonieta Rivas Mercado, Gabriela Mistral, Manuel Gómez Morin, Alberto Vásquez del Mercado y Miguel Palacios Macedo. Actos que fueron correspondidos con una fuerte represión de parte de sus opositores, asesinando a varios de los líderes vasconcelistas, y ejerciendo la violencia contra sus simpatizantes el día en que se llevó a cabo la jornada electoral.

El resultado fue de 93% sufragios para Ortiz Rubio y el resto para Vasconcelos. A lo que Vasconcelos decidió seguir las acciones que en su momento Francisco I. Madero cuando fue derrotado por Díaz; a través del plan que denomino “de Guaymas”, mientras de nueva cuenta, Vasconcelos se encontraba en el exilio en los Estados Unidos. Un llamado que no fructifico, pues ya habían pasado diez años de guerras, y todo lo que ello traía como consecuencias, era el cansado y, económicamente hablando, penoso saldo de la revolución mexicana.

En 1940 Vasconcelos regresó a México bajo la política de reconciliación que Manuel Ávila Camacho (1897-1955) implementó como uno de sus principios de gobierno, a su llegada, fue nombrado el primer director de la Biblioteca de México, ubicada en la antigua construcción de la Ciudadela.

Fue en esa época que mostró simpatías por la Alemania nazi, y que llegó a dirigir un periódico patrocinado por la embajada alemana. Sin embargo, autores como Acosta Rico, Fabián. (En El pensamiento político de José Vasconcelos. México: Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado de Jalisco, 2004), afirman que Vasconcelos se deslindó del fascismo al conocer las brutalidades que cometieron contra la humanidad.

El 12 de junio de 1953 fue nombrado miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, ocupando la silla V y designado el cuarto bibliotecario de dicha institución.

José Vasconcelos murió en Tacubaya, Ciudad de México, el 30 de junio de 1959. Su cuerpo fue encontrado reclinado sobre su escritorio.

dsc03143

No hay comentarios:

Publicar un comentario