martes, 16 de abril de 2013

José Vasconcelos (1882-1959): impulsor de la revolución en los andamios “El muralismo mexicano”. II

 

Como parte del naciente proyecto revolucionario durante el gobierno de Álvaro Obregón, se creó la Secretaría de Educación Pública por Decreto oficial publicado en el Diario Oficial de la Federación el 3 de octubre de 1921, como “una institución que pertenece a la administración pública central” y que llevo a la desaparición del Departamento Universitario y del Departamento de Bellas Artes, los cuales seguían la tradición porfiriista en materia educativa y de política pública.

Nombrando el Ejecutivo como titular de la recién creada Secretaría a José Vasconcelos; tres fueron los departamentos que integraron la SEP: Escuelas, Bibliotecas, y Archivos y Bellas Artes. Durante la gestión de Vasconcelos, el Departamento Escolar fue el eje de la educación de las masas, se fundaron escuelas rurales, comerciales, nocturnas para obreros y también se establecieron institutos técnicos.

Resulto de gran importancia e interés el Departamento de Bellas Artes, como órgano de difusión y educación de los hombres por medio del arte. Entre los que destacan inicialmente la participación de los artistas: Roberto Montenegro (1887-1968) junto con Jorge Enciso al ser los primeros en realizar la decoración mural en el ex templo de San Pedro y San Pablo en la ciudad de México. También de Gerardo Murillo (1875-1964) –el Dr. Atl-, y de José Clemente Orozco (1883-1949) quién fue ilustrador de los libros de texto.

 

Debido al momento histórico y procesal propio del animo pos revolucionario que se vivía en el país, se dieron pasos en las academias de artes para revalorar el arte popular y prehispánico. Surgiendo así el muralismo mexicano.

El muralismo mexicano se caracterizo por ser un arte de gran formato, para ser contemplada por el público en espacios concurridos, al aire libre o en espacios cerrados, y que le permiten al espectador de una forma rápida integrarse al tema que esta plasmado. Pero sobre todo su pretensión fue la de educar colectivamente mediante mensajes nacionalistas y socialistas, propios del momento histórico por el que atravesaba México.

Así José Vasconcelos, hizo la revolución también en los andamios, impulsando entre los artistas la cultura popular y que se plasmara a la vista de todos en grandes muros que hasta nuestros días cumplen con su labor: ser referente de identidad social.